Hablar de Whisky de malta hoy en día te obliga a mencionar a Japón como uno de los mejores productores del mundo y más concretamente la destilería Nikka. Todavía no son muy conocidos entre el gran público pero desde luego se han labrado un puesto relevante en las mejores cartas de whisky. Y no es casualidad que sean un referente mundial dado que su fundador, Masataka Taketsuru empezó a producir whisky en Japón en la década de 1920, después de haber viajado a Escocia y haber aprendido el arte de la destilación de la malta.
Sus joyas son los Single Malt “Yoichi” de 10 y de 20 años. El de 10 es un whisky frangante, con una buena relación de turba que no impide que se perciba claramente las notas especiadas y ligeramente frutales. Mientras que su hermano mayor de 20 años es de una complejidad sobresaliente, con la turba presente pero muy bien integrada pudiendo percibir muy claramente aromas de vainilla, cuero, frutos secos y ligeramente yodados. Desde luego son dos productos para descubrir y disfrutarlos en buena compañía.